“I Will Always Love You” es una poderosa balada interpretada por Whitney Houston, originalmente escrita por Dolly Parton. La canción expresa una despedida llena de amor, gratitud y respeto, donde la protagonista reconoce que debe alejarse, pero promete que su amor permanecerá intacto. Con una interpretación vocal icónica, Houston convirtió este tema en un himno emocional que mezcla vulnerabilidad y fuerza, alcanzando niveles históricos de popularidad y reconocimiento mundial.